Para 1958, esta no superaba los 649 000 000 millones de dólares. A partir de ese año y hasta principios de la década de los 70s, el país entro en la etapa del desarrollo estabilizador: la sociedad mexicana gozo de gran bonanza material lo cual genero mucho optimismo y fe en el progreso y la modernidad.
Por otro lado, la productividad interna también se afecto fuertemente. El consumo interno se redujo en muchos empresarios y prefirieron invertir sus capitales fuera del país. La situación económica era difícil y el gobierno mexicano veía "el fin de la ilusión del milagro mexicano"
El desarrollo que vivió México, entre 1940 y 1960 produjo a su vez, un periodo con muy bajos niveles de inflación y estabilidad económica. La ausencia de productos importados favoreció el crecimiento de las industrias nacionales y la regeneración de los mercados internos.

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